Sintiendo Mariposas, por S.M.A.

Seguro que en más de una ocasión has escuchado la expresión mariposas en el estómago. La verdad es que se trata de una forma metafórica de definir ese nudo en el estómago o esos nervios constantes que experimenta cualquier persona cuando comienza a sentir algo por otra. Las mariposas en el estómago pueden sentirse a cualquier edad, especialmente, cuando se tiene una fe plena.

Las mariposas en el estómago son bonitas porque cuando estás en esa fase del amor la realidad te parece diferente. Más perfecta, más bella y crees que tienes nuevas razones para vivir y para ser feliz. Evidentemente, las mariposas no revolotearán eternamente en tu estómago, se trata de un síntoma físico que como tal será temporal. Por ello, disfrútalo mientras dure porque tiene fecha de caducidad.

Las mariposas son seres de una belleza excepcional, con el don de poder volar y sentirse libres. Pero a la vez de una enorme fragilidad.

Hay muchas formas de sentir mariposas, además de la que todos asociamos cuando escuchamos la expresión popular, pero para mí, esa sensación la experimento cuando me dedico tiempo a mí misma, pienso en mí y olvido al resto del mundo. ¿Y cómo logro esto? Es sencillo. Dedico tiempo en mi agenda para cuidarme y que me cuiden, para que me quieran, para que mimen. Y lo consigo reservando cita en mi centro de belleza, dándome el capricho de un tratamiento realizado por profesionales, donde consigo desconectar y recargar pilas, armonizar mi cuerpo y mi mente, olvidarme de todo y de todos durante ese tiempo. Para mí, eso es sentir mariposas. Y siempre que pueda, dedicaré ese momento para no dejar nunca de sentirlas.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *